No cabe duda de que, durante la próxima década, el Edge Computing estará en el epicentro de la estrategia tecnológica de muchos sectores industriales.
De hecho, el edge pagará las facturas de un gran número de negocios. Y hay un buen motivo para ello; Gartner ha mostrado la explosión que veremos en nuevas ubicaciones de creación de datos:
“Actualmente, alrededor del 10 % de los datos generados por empresas se crean y procesan fuera de un centro de datos centralizado tradicional o de la nube. En 2022, Gartner predice que esta cifra llegará al 50 %.”
Adaptarse para el edge
Empresas de todo tipo y tamaño van a tener que adaptar su modelo comercial para afrontar con éxito la cambiante geografía de la creación de datos. De hecho, este factor sostiene toda la visión que tendremos del futuro. Gartner ha analizado la necesidad de que las tecnologías envolventes y la inteligencia artificial adopten rápidamente el edge como parte de su estrategia básica. Así pues, esta visión dependerá de dispositivos inteligentes y conectados que no pueden permitirse tener la latencia de un modelo de centro de datos centralizado tradicional.
En el caso de los proveedores de colocation, esto acentúa la necesidad de tener una oferta integral de computación del edge que actúe como base de confianza para las estrellas tecnológicas del futuro. Pero el liderazgo de los proveedores de colocation con respecto al edge también tendrá una gran importancia en otros aspectos: por ejemplo, ayudar a que la empresa tradicional actual evolucione. Más allá de la oportunidad de dar servicio a las tecnologías que miran al futuro, puede haber modelos más amplios que estén basados en el despliegue inteligente de infraestructuras de TI en el edge.
El Edge Computing como servicio premium
En el caso de las empresas, la capacidad para reducir la latencia a un nivel extremadamente bajo podría permitir la prestación de un servicio premium a sus clientes. Determinados tipos de experiencia de aplicación o modelo de suministro de datos podrían permitir suscripciones de mayor valor dirigidas a clientes que tengan una gran necesidad de velocidad. Y en consecuencia, para los proveedores de colocation que busquen aumentar el negocio con estas empresas, una estrategia de Edge Computing resultaría muy atractiva desde el punto de vista comercial. En otras palabras, los proveedores de colocation que apliquen correctamente su estrategia de edge podrán convertirse en los facilitadores de las experiencias de datos de nivel premium.
De hecho, existe una amplia gama de modelos de negocio que podrían evolucionar con una buena estrategia de Edge Computing. Una de las posibles hipótesis es que se necesitaría una menor potencia de procesamiento en dispositivos como smartphones y tablets. Actualmente dependemos de dispositivos capaces de gestionar un gran volumen de procesamiento dentro de la aplicación, ya que una latencia perceptible al devolver una solicitud a un servidor distante imposibilitaría una experiencia de usuario de alta calidad. Pero si conseguimos pasar la barrera de la latencia mediante el suministro desde el edge y no desde el centro de procesamiento, podríamos liberar los dispositivos para que actuaran más como un terminal que como un dispositivo de computación completa. Toda una nueva era de servicios de aplicación podría emerger para dar soporte a esta evolución.
Encontrar la financiación para el edge
No cabe duda de que el edge supone una enorme oportunidad comercial para el mercado del colocation. Pero para muchos proveedores de colocation, la decisión estratégica de apuntar al edge requerirá una importante inversión de capital para conseguir instalaciones y construir nuevos microcentros de datos en el edge. Como es lógico, habrá que negociar con bancos e inversores, ya que los proveedores de colocation buscan sustentar ambiciosas estrategias de crecimiento. A cambio, los responsables de la financiación querrán conocer la viabilidad de este nuevo modelo, especialmente en lo que respecta a solucionar problemas de seguridad y disponibilidad.
Por tanto, si los proveedores de colocation no pueden lograr que su estrategia de Edge Computing sea sólida y resistente, es posible que no lleguen a dar ni un solo paso. Tendrán que cambiar su forma de pensar para dar cabida a un enfoque más complicado sobre la seguridad física. La infraestructura de TI va a estar mucho más dispersa, y su fiabilidad dependerá de servidores y racks, conmutadores y PDU, alimentación y refrigeración... Todos ellos factores clave para mantener la disponibilidad. Y la posibilidad de que se produzcan ciberataques, aprovechando un punto débil en una ubicación de edge, hará que la ciberseguridad suba hasta los primeros puestos de la agenda del edge.
Nada de esto será fácil o rápido de resolver. Pero el colocation se ha convertido en el modelo elegido para un gran número de empresas que buscan un modelo de infraestructura de TI más innovador. El reto ahora es para los proveedores de colocation: permanecer a la vanguardia de la innovación.
